Andrés Chicaiza rompe el silencio y denuncia incumplimientos de la directiva de Liga (ENTREVISTA)
El Mago contó su verdad tras varios años de ceder pese a falsas promesas y malos tratos en la U
Llegó el momento de la verdad y pese a que el ‘10’ quiso pelear por un lugar en el Rey de Copas, otra vez le han bajado el pulgar. Para él, no queda otra opción que buscar un destino, pero donde las negociaciones sean fructíferas y ya no le quieran afectar como al parecer, ha venido ocurriendo desde hace tiempo.
Andrés Chicaiza no se mordió más la lengua y convocó a rueda de prensa para hacer su repaso desde su llegada a Liga donde Papá Oso le brindó la confianza más allá de que se ganó el desprecio de Pablo Repetto, DT que perdió dos finales seguidas en penales. “He guardado silencio por tres años y personas han tomado mi nombre para desacreditarme. En 2019 llegué a Liga gracias a Don Rodrigo quien fue la persona que confió en mí. Nunca fui del agrado del entrenador y no tuve regularidad por la falta de minutos. Pese a todos si hacemos memoria, hice el gol ante Flamengo que nos dio la clasificación en Libertadores y fui convocado por Ecuador. Luego no tuve la oportunidad que quería por lo que vine haciendo, pese a que a fin de año marqué dos goles en Copa Ecuador”.
El Mago tuvo que mudarse al Trencito Azul con un engaño de por medio, el Sachi Escobar no lo tuvo en sus planes cuando en conversaciones, le dijeron lo contrario. “En 2020 se da mi paso de ir a Universidad Católica con una propuesta que no se cumplió. En el tema mensual para no hacer problemas con la directiva, cedí 7.000 dólares mensuales para tener regularidad y minutos. Nos cayó una pandemia a nivel mundial y la decisión del club fue de bajarnos un 25% que era algo para no reclamar, era un tema humano que aceptamos como plantel. Para ir a Católica se me ofreció un valor de 17.000 dólares que hasta hoy no se me ha cumplido, pese a todo fui a ganarme un puesto y sin el consentimiento del cuerpo técnico cuando me dijeron lo contrario”.
Chicaiza se presentó a la pretemporada del Albo en enero del año anterior y volvió a ser víctima de un mal trato sin conocer si fue orden de Pablo Repetto o la directiva. “En 2021 me presento a cumplir con mi contrato y no me permitieron entrenar con el primer equipo de Liga. Me quitaron los uniformes y para no polemizar, decidí ir a reserva para no molestar. Después de tres semanas, arreglé con Deportivo Cuenca y tras conversar con el profe, arreglé el tema económico. Accedí nuevamente a bajarme 4.000 dólares mensuales para jugar y así fue”.
Ahora el Mago que ya sabe de ante mano que no formará parte de la U, solo tuvo gratitud con el actual cuerpo técnico quien lo ha tenido entrenando, más allá de que hoy le hicieron un nuevo desplante. “Este año regreso nuevamente porque tengo vínculo con Liga por dos años más. Agradecer a Pablo Marini a quien me trató primero como persona que como jugador, más cuando sabía que no iban a contar con mis servicios, me ha permitido entrenar con el primer plantel. Estamos negociando con la directiva para tener estabilidad y tranquilidad. Al no llegar a un acuerdo, se me notificó que ya no entrenaría con el plantel”.
El futbolista pidió que se pongan en sus zapatos y que comprendan que no es enemigo de la U o que quiere aprovecharse de alguna situación en particular. “Que sepan que Andrés Chicaiza quiere ceder una vez más. Espero llegar a un acuerdo en las próximas horas. Es mi trabajo y nadie me ha regalado nada. Yo no obligué a la gente de Liga para que me compren. Nadie sabe que en 2010 y 2011 jugué gratis, que me he probado en más de cinco equipos sin oportunidad. La gente solo se fija en que uno no cede y hay que acabarle al jugador”.